Comprender la historia del barril
La historia de la barrica es esencial en el contexto de las bebidas espirituosas Es esencial conocer el tipo de aguardiente envejecido previamente en la barrica, cuánto tiempo se ha utilizado y con qué frecuencia. Un barril que haya contenido un whisky escocés tendrá características diferentes a otro que haya envejecido ron, coñac o bourbon.
Inspección visual y estructural
Comprobar visualmente la integridad mecánica del exterior y el interior es esencial para garantizar un buen sellado para la futura cría. La integridad estructural es crucial, ya que la presión interna puede ser muy elevada debido a las variaciones de temperatura durante un envejecimiento prolongado.
Evaluación olfativa
El olfato desempeña un papel fundamental en la selección de las barricas para las bebidas espirituosas. La barrica debe estar libre de olores a moho, podredumbre o contaminación química. El olor característico del aguardiente anterior no debe quedar enmascarado por la presencia de azufre o una desviación aromática.
Documentación y certificación
Pide documentos que acrediten el origen, la antigüedad y el contenido anterior de la barrica. En el caso de las bebidas espirituosas, las certificaciones específicas también pueden atestiguar el cumplimiento de determinadas normativas o prácticas de producción, ofreciendo una garantía adicional de calidad de la barrica.
Seleccionar una barrica de segunda mano para bebidas espirituosas exige prestar especial atención a su historia, integridad estructural y potencial aromático remanente. No debe tener aroma a azufre. Al realizar una evaluación completa, los destiladores pueden asegurarse de que la barrica elegida enriquecerá el perfil de sus espirituosos con los matices deseados, garantizando al mismo tiempo la seguridad y la calidad del proceso de envejecimiento.